Jaime Cantero Rodríguez - El movimiento por el decrecimiento: ¿Una alternativa a la crisis sistémica?. Primeros pasos en Francia y España
La
actual crisis sistémica financiera, que afecta a un gran número de
países occidentales consecuencia en gran medida del abuso de su
capacidad de endeudamiento, es combatida de varias formas pero por lo
general siguiendo unos mismos patrones2. Básicamente, las
alternativas que hasta ahora se vienen presentando y defendiendo son,
la elección entre unas políticas macroeconómicas regresivas de
corte neoliberal y un programa económico expansivo de tipo
keynesiano.
Con
el desarrollo de este artículo pretendo exponer y contrastar la
hipótesis según la cual el cuerpo teórico que ofrece el movimiento
por el decrecimiento sería la única alternativa económica y social
viable, y así analizar sus argumentos y propuestas con el fin de
valorar si suponen una alternativa frente a aquellas dos teorías
principales. El movimiento por el decrecimiento parte de la base de
que cualquier sistema económico que no sea sostenible es inviable y
se sustancia en la no contradicción de principios tan aceptados como
los de la termodinámica.
Esta
sospecha de la insostenibilidad del sistema actual ya es apuntada
incluso por algunas instituciones internacionales que animan a buscar
soluciones distintas a las que se vienen proponiendo a los problemas
que acontecen en el seno de la Unión Europea3.
A
lo largo de este artículo se pretende estudiar el origen, la
concreción, la cohesión y la viabilidad de las propuestas así como
las principales críticas al movimiento por el decrecimiento. Para
ello se estudiarán las tesis defendidas por sus principales
proponentes así como a autores que han defendido o defienden
patrones similares de desarrollo pese a no autodenominarse como
pro-decrecentistas. Por supuesto también se contrastarán las
críticas de sus principales detractores. Por último, también se va
a exponer la situación y su previsible desarrollo tanto en España
como Francia en el contexto de la Unión Europea.
La
hipótesis a contrastar parte de la idea de que las principales
teorías económicas que se han llegado a aplicar a lo largo del
siglo XX y que se fundamentan en la esperanza en un crecimiento
futuro, han llegado a poder tener éxito gracias a la inestimable
ayuda de un factor: los hidrocarburos fósiles, sin los cuales pocas
posibilidades habría del incremento de la actividad económica.
Además,
como apunta Luis González, “el crecimiento no es una
consecuencia posible de este sistema: es una condición indispensable
para que funcione. Si la economía capitalista deja de crecer, se
colapsa” (González, 2011:231). La situación de crisis
financiera que vivimos sería por lo tanto parte de este
desmoronamiento del sistema consecuentemente.
Aunque
el movimiento por el decrecimiento por lo general empieza a contar
con una aceptación social y académica significativa, el debate
sobre el mismo está en sus primeros estadios y no puede decirse que
su presentación se haya logrado al menos como alternativa real. Ésta
conllevará muy probablemente una respuesta firme del sistema
capitalista como más tarde expondré.
La
defensa de este sistema económico-social, de poder llevarse a cabo,
exigiría una revolución integral de muchos de los fundamentos de la
sociedad tal y como la conocemos hoy. Un análisis de esos cambios y
los obstáculos que tendrían que enfrentarse, así como de la
velocidad idónea para ir adoptando estas medidas, se va a
desarrollar a lo largo del artículo.
El
método elegido para hacer el seguimiento y estudio de las propuestas
hasta ahora existentes en torno al decrecimiento será principalmente
la revisión bibliográfica de algunos de los autores más destacados
en el tema (Latouche, Gorz, Taibo o Ridoux) y de los que, aun no
denominándose pro-decrecentistas, defienden medidas o planteamientos
económicos y sociales parecidos (Rodrigo Mora, Viveret).
Varios
de los artículos que analizo recogen las principales críticas a
este movimiento y en cierta medida la queja de su poco desarrollo,
consecuencia a su vez de la incipiente dedicación académica al
decrecimiento o a su crítica. Es verdad, en todo caso, que en fechas
recientes están apareciendo publicaciones más generalistas que
recogen los principales rasgos del movimiento por el decrecimiento.
Así mismo,la aparición de un partido político en Francia,
organizaciones en Cataluña (Xarxa pel Decreixement), varias
páginas y las redes sociales en Internet están contribuyendo a su
difusión.
Lo
incipiente de este movimiento y el direfente grado de desarrollo del
mismo hace difícil una comparación pormenorizada entre dos Estados.
Por esto, principalmente se van a estudiar las respuestas sociales,
políticas y académicas que se empiezan a concretar y su previsible
desarrollo así como los principales problemas que se empiezan a
encontrar. Es decir, se procurará al menos un “análisis
asimétrico”.
El
estudio de los autores que dieron origen a las ideas matrices del
movimiento aparecerá también a lo largo del artículo para
fundamentar el desarrollo de las teorías pro-decrecentistas, los
obstáculos que están encontrando para imponerse y la validez de
aquellas ideas en el mundo actual.
Con
el desarrollo de este trabajo se pretende también la comprobación
de alguna de las hipótesis que se plantean en varios artículos por
algunos autores para contrastar su validez. Para esto se utilizarán
datos obtenidos a partir de fuentes estadísticas y de instituciones
internacionales. En definitiva, lo que se pretende es un análisis de
coherencia del movimiento prodecrecentista en cuanto a la teoría que
lo sustenta y a su aplicabilidad especialmente en España y en
Francia.
El texto completo del artículo está en el número 2 de la revista Clivatges de Universidad de Barcelona
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