Crítica de Miguel Amorós al decrecimiento
En el mismo texto de Amorós se puede leer esta frase: “El crecimiento es la condición necesaria del capitalismo; sin crecimiento el sistema se desmoronaría”
Sin embargo el texto comienza así:
“La ideología del decrecimiento es la última mutación del ciudadanismo tras el miserable fracaso del movimiento contracumbres; una ilusión renovable, como dirían Los Amigos de Ludd. Como trivialización de la protesta y supresión del conflicto, es un arma auxiliar de la dominación.”
La respuesta a esta contradicción creo que tiene que ver en el modo en el cual Amorós plantea la lucha.
Para Amorós el sujeto de la lucha sería una clase oprimida que se enfrenta a las fuerzas de dominación para cambiar el mundo mediante movilizaciones y en último término cuando las fuerzas sean importantes dar un golpe definitivo y abolir el sistema capitalista.
"Pero ya no existen los palacios de invierno, y la bastilla ¿dónde está?. ¿Y el poder?. El poder no es sólo una dominación real sino una dominación simbólica que anida en nuestro inconsciente. Nuestro adversario: las grandes transacionales, los grupos financieros, los medios de comunicación...no ejercen el poder directamente. El Gran hermano es anónimo, la servidumbre es voluntaria, las clases oprimidas aceptan como ‘natural’ la opresión. Y que hablar de las fuerzas de represión directa (ejército y policía); en caso de poder llevarse a cabo una acción subversiva -¿contra quién?- ¿que nivel de violencia habría que alcanzar?.
El capitalismo como sistema, como ‘modo de producción’ es una creación de la mente, útil para comprender una realidad compleja, pero peligrosa si consideramos el concepto de manera fetichista. Actualmente, el conjunto de empresas, las administraciones y los hogares participan de la lógica capitalista, porque ésta es la de los actores dominantes de la sociedad moderna y ha colonizado las mentalidades.
La eliminación de los capitalistas, la prohibición de la propiedad privada de los bienes de producción, la abolición de las relaciones salariales o de la moneda abocarían a la sociedad a un caos, y sólo serían posibles a costa de un terrorismo masivo. Y, por otro lado, esto no bastaría para abolir el imaginario capitalista."
El proyecto de decrecimiento es un proyecto de construcción, yo lo llamo un proyecto de mujer, donde hay que construir un orden simbólico que nace de lo que ya hay y que ya forma parte de nuestra vida.: Las relaciones familiares, como la amistad, las de amor y las políticas, se basan en una forma de intercambio que la lógica mercantil tiende a negar y a destruir. Y estas relaciones no solamente se pueden mantener, sino que, además, en ellas está la parte más importante de nuestras vidas y en donde las personas cuentan porque son únicas. En estas relaciones se intercambian palabras, atenciones, afectos, emociones, e incluso bienes, como cosas, ayuda y hospitalidad.
El futuro será mujer o no será.
Me ha parecido una respuesta muy bien sustentada. ¿Me podrías decir quién es Miquel Amorós?
ResponderEliminarMuchas gracias
Un saludo
Hola:
ResponderEliminarMiguel Amorós (también Miquel Amorós) es un historiador, teórico y militante anarquista español.
Buscando en google tienes algunos artículos escritos por él.
Puedes empezar por aquí:
http://www.kaosenlared.net/noticia.php?id_noticia=26444
salud y alegría.
La respuesta a la crítica de Miquel Amorós empieza planteando una contradicción que no es tal, puesto que esa contradicción sólo se puede extraer malinterpretando las frases.
ResponderEliminarPor una parte M. Amorós habla del decrecimiento como un hecho económico y luego habla de la "ideología del decrecimiento", que son dos cosas distintas, y Amorós ataca a esta ideología.
Este ataque queda bastante bien claro y argumentado en el siguiente fragmento de su crítica:
"Agricultura campesina, reducción del consumo y de la movilidad, prioridad de las relaciones, alimentación sana, redes locales de trueque, no competir, no acumular, etc..., son ideas antidesarrollistas que pierden todo el sentido cuando no se quiere la fractura social que sus intentos de realización efectiva han de provocar cuando su generalización altere seriamente las condiciones de producción e intercambio poniendo en peligro la existencia del mercado, de las instituciones y de las clases sociales privilegiadas. Presionada por la necesidad de apaciguamiento, cualquier medida alternativa sigue la dirección del capitalismo."
Ciertamente, Amorós, plantea la lucha entre opresores y oprimidos, simplemente porque esto es así.
Pueden cambiar las formas de dominación, puede que hoy en día sean más profundas y que esta dominación se sitúe directamente (más aún que en épocas pasadas: religión) en las mentes de las personas, que no ven tan clara la dominación y la alienación gracias a los "beneficios" del Estado de Bienestar, que de momento ha conseguido esconder bastante bien las contrapartidas de estos beneficios, o al menos controlar las críticas a estas a través de los medios de comunicación, que sólo permiten críticas a aspectos parciales, sin otorgar una unidad a estas críticas que permita consolidar una auténtica crítica al modelo de crecimiento de forma generalizada.
Pero no deja de existir la diferencia (aunque no siempre muy clara, reconozcámoslo) entre quienes tienen cuota de poder y entre quienes no la tienen, y ante este hecho, me surge la duda de cómo piensan los ideólogos del decrecimiento que van a frenar el progreso. ¿Será acaso a través del poder político? Lo dudo.
El problema es el cómo, que no es poco, más aún, lo es todo.
Puede que Amorós no sea muy afortunado en sus escritos, pero no se pueden afirmar cosas como haces tú sin dar ninguna argumentación, pues es mera especulación, del tipo:
ResponderEliminar"La eliminación de los capitalistas, la prohibición de la propiedad privada de los bienes de producción, la abolición de las relaciones salariales o de la moneda abocarían a la sociedad a un caos, y sólo serían posibles a costa de un terrorismo masivo".
¿Se vieron las colectividades del 36 abocadas al caos y a costa de un terrorismo masivo?
La construcción de los imaginarios es producto de siglos. Pretender esperar a cambiarlos supondría siglos. Es decir, lo que propones es un proceso aún más lento que el reformismo. De hecho tu afirmación anterior lo que trasluce es tu oposición al socialismo en todas sus variantes, del anarquismo al comunismo autoritario. Esa frase sería propia de la ultraderecha.
Del resto, queda muy bonito lo que dices, pero nada más, es una mera especulación, mezcla de ilusión y buenrrollismo, que solo sirve de facto para distraer, disgregar fuerzas y reforzar al sistema capitalista y patriarcal.
Es a eso a lo que se opone Amorós, no al decrecimiento en sí, sino así. No había contradicción, como afirmas al inicio del artículo.
Salud y ternura
"El capitalismo como sistema, como ‘modo de producción’ es una creación de la mente, útil para comprender una realidad compleja, pero peligrosa si consideramos el concepto de manera fetichista."
ResponderEliminarSi es una creación de la mente, ¿Como se reproduce?, la dominación (y la servidumbre) ¿Cómo se reproduce?, ¿Es el individuo que todo lo puede quien lo reproduce? ¿Es como si una cosa y otra las llevasemos en los genes? El discurso empieza a asemejarse demasiado al discurso liberal. ¿Dominación y capitalismo no son también estructuras, además de mentales, bien palpables que ocupan desde la educación y la comunicación a los paradigmas cognitivos?
Si afirmas:
"Actualmente, el conjunto de empresas, las administraciones y los hogares participan de la lógica capitalista, porque ésta es la de los actores dominantes de la sociedad moderna y ha colonizado las mentalidades.
" tu mismo estás difiniendo tu propia bastilla. ¿Por qué no empiezas por ella? Ninguna estructura de poder humana es anónima, el poder sólo puede disfrazarse: de democrácia, de comunicación, de educación, de ciencia.... El propio discurso nihilista de lo anónimo es servidumbre.
dices:
"La eliminación de los capitalistas, la prohibición de la propiedad privada de los bienes de producción, la abolición de las relaciones salariales o de la moneda abocarían a la sociedad a un caos, y sólo serían posibles a costa de un terrorismo masivo. Y, por otro lado, esto no bastaría para abolir el imaginario capitalista.
El proyecto de decrecimiento es un proyecto de construcción, yo lo llamo un proyecto de mujer, donde hay que construir un orden simbólico que nace de lo que ya hay y que ya forma parte de nuestra vida.: Las relaciones familiares, como la amistad, las de amor y las políticas, se basan en una forma de intercambio que la lógica mercantil tiende a negar y a destruir. Y estas relaciones no solamente se pueden mantener, sino que, además, en ellas está la parte más importante de nuestras vidas y en donde las personas cuentan porque son únicas. En estas relaciones se intercambian palabras, atenciones, afectos, emociones, e incluso bienes, como cosas, ayuda y hospitalidad.
"
Toda transformación nace de lo "que ya hay" la única pregunta es si lo que nace se sustenta en un nuevo paradigma, en una nueva cosmovisión o si, servilmente, simula teatralmente un nuevo entorno en donde el imaginario, el mito colectivo sige incólume. Eso es lo que criticáis del "crecimiento sostenible" eso es lo que criticamos del "decrecimiento".
Os lo dice con dureza pero con todo el cariño alguien que transitó por el decrecimiento buscando respuestas y lanzando propuesta.
Vaya argumentación amigo.. Es simplemente maniquea tu interpretación de los textos de Amorós y además te lanzas a la piscina aventurándote a explicar cómo concibiría éste el cambio social. Y bueno.. ¿el futuro será mujer o no será? ¿El poder no es sólo una dominación real sino una dominación simbólica que anida en nuestro inconsciente?
ResponderEliminarPerdona pero.. ¿qué me estás contando?
NO hay ninguna contradicción en lo q dice Amorós
ResponderEliminaren cambio, las contradicciones sí estan en el capitalismo: se basa en crecimiento continuo y acumulación de capital, al tiempo q hace cada vez más precaria las condiciones de vida de la clase productora
aunque esto se ha tratado de evitar para darle estabilidad y garantizar el consumo en Occidente, con los Estados de Bienestar primero, y despues de los 70, con la cultura del crédito
si ahora el sistema bancario y financiero se va a la mierda (imposibilitando el reactivar la economia y el consumo otra vez mediante la concesion de creditos), al tiempo q acaban de desmantelar los Estados de Bienestar, surgiran otra vez las contradicciones
Como persona que he transitado por algunos movimientos sociales y ong's en Cataluña...descubrir a Amorós ha sido pensar ya era hora que alguien dijera las cosas por su nombre y pusiera en su lugar a todos esos hijos de la burguesía catalana que juegan a salvar el mundo y ser "alternativos".
ResponderEliminarFelicidades Miquel Amorós...un enorme placer descubrir tus escritos
Por el entrecomillado no me queda claro qué dice el autor del comentario y qué Amorós, siempre lúcido; y tampoco veo ninguna argumentación. En todo caso, lo de que "el futuro es mujer" para mi no significa nada.
ResponderEliminar"La eliminación de los capitalistas, la prohibición de la propiedad privada de los bienes de producción, la abolición de las relaciones salariales o de la moneda abocarían a la sociedad a un caos, y sólo serían posibles a costa de un terrorismo masivo."
ResponderEliminarDice Latouche demostrando que es todo lo contrario de un revolucionario, por tanto que quiere mantener el capitalismo, que es un agente del capitalismo, como la Universidad, haciendo ciertos todos los argumentos en su contra de Miguel Amorós, del que se puede leer más aquí https://sites.google.com/site/fandangorevolucion/fuego-antidesarrollista/miguel-amoros-textos-y-audios
y de Rodrigo Mora del que recomendamos "Revolución integral o decrecimiento": http://es.scribd.com/doc/70124973/REVOLUCION-INTEGRAL-O-DECRECIMIENTO
salud autogestión acción y reflexión;
FANDANGO-REVOLUCIÓN.
https://sites.google.com/site/fandangorevolucion/
Hola:
ResponderEliminarLas banderas detrás de las cuales se arman los ejércitos tienen nombres altisonantes y con mayúscula: por la “Libertad”, por la “Democracia”, por el “Socialismo”, contra el “Capitalismo”, contra el “Fascismo”. ( ... ) Desgraciadamente estas palabras ocultan una lucha por ser el más fuerte donde puede más que querer demostrarlo y cumplir el sueño de la imaginación que la obtención de beneficios materiales. Así estamos hechos los humanos, ésa es nuestra barbarie.
las guerras son episodios imaginarios, aunque la muerte y la desolación sean muy reales. La guerra impide ver la realidad en sus propios límites: quienes se enfrentan proyectan sobre el otro la imagen que les permite verse a sí mismos como poderosos y exultantes. Puesto que este error de la imaginación lo practican todos los que participan de las guerras – e incluso quienes no participan y se limitan a ser espectadores – las consecuencias de la victoria de unos y la derrota de otros llevará la marca de ese error.
Así pues, ‘ser revolucionario, puede tener dos sentidos: esperar que todo cambie mediante un vuelco que ponga a los de abajo arriba e inicie el camino hacia una situación en la que deje de existir el arriba y el abajo – este es el significado marxista; o ayudar a aligerar el peso que aplasta, rehusar las mentiras con las que se justifica la humillación y contribuir a dar a los de abajo el sentimiento de que ellos también tienen valor
ResponderEliminarUn artículo que publicamos hace unos años criticando la crítica de Amorós
ResponderEliminarhttp://info.nodo50.org/Nuevo-articulo,3189.html