La crisis en curso apenas ha suscitado otras reflexiones que las que se interesan por su dimensión financiera. De resultas, han quedado en segundo plano fenómenos tan delicados como el cambio climático, el encarecimiento inevitable de los precios de las materias primas energéticas que empleamos, la sobrepoblación y la ampliación de la huella ecológica. En este libro se intenta rescatar esas otras crisis, y hacerlo con la voluntad expresa de identificar dos horizontes de corte muy diferente. Si el primero lo aporta un proyecto específico, el del decrecimiento, que cada vez es más urgente sea asumido como propio por los movimientos de resistencia y emancipación en el Norte opulento, el segundo lo proporciona un grave riesgo de que, en un escenario tan delicado como el del presente, gane terreno un darwinismo social militarizado que recuerde poderosamente a lo que los nazis alemanes hicieron ochenta años atrás. En la trastienda se aprecia, de cualquier modo, la necesidad imperiosa de contestar el capitalismo en su doble dimensión de explotación e injusticia, por un lado, y de agresiones contra el medio natural, por el otro.
Decrecimientos. Iñaki Barcena, José Vicente Barcia Magaz, Chema Berro, Manuel Casal Lodeiro, Fernando Cembranos, Enrique Javier Díez Gutiérrez, José Luis de la Flor, Luis González Reyes, Yayo Herrero, Paco Puche, Eugenio Reyes, Manoel Santos y Carlos Taibo (dir.).
Hoy en día disponemos de una teoría general sobre el decrecimiento que ha ido adquiriendo cada vez más fuerza. Para completar este proyecto, sin embargo, urge trasladar los conceptos teóricos generales a ámbitos más concretos. Esto es precisamente lo que proponen los autores: una reflexión sobre lo que debería cambiarse en la vida cotidiana a través del estudio de doce terrenos relevantes del decrecimiento: el medio urbano y el medio rural, las mujeres y las migraciones, la sanidad y la educación, el mundo sindical y el ocio, el transporte y los medios de comunicación, los indicadores económicos y los países del Sur.
Decrecimiento o barbarie. Paolo Cacciari
Estamos instalados en la crisis. Y no será un paréntesis. Este libro esboza una posible salida de la recesión global dando un vuelco a los paradigmas de la modernidad. Una revolución económica (el decrecimiento) y política (la noviolencia activa) que ya viven en el archipiélago de los movimientos de resistencia comunitaria, en los de las mujeres y de las nuevas generaciones, y que está a la espera de una cita con las luchas para liberar el trabajo del yugo productivista. La "crítica al desarrollo" no puede no ir acompañada por un proyecto político de autogobierno. Y a la inversa.
El crecimiento mata y genera crisis terminal. Julio García Camarero
Este libro gira en torno a tres polos, o enfermedades sociales, en los que, según el autor, se basa el lamentable sistema capitalista que padecemos: la obsesión de la acumulación de la plusvalía por encima de todo; el consumismo-productivismo, como fundamento de esta acumulación; y la explotación del hombre y de la mujer y la sobreexplotación de la naturaleza, y todo a través del trabajo enajenado-asalariado. El autor mantiene la tesis de que, dado el enorme progreso del conocimiento-tecnología, si no fuera por estas enfermedades sociales, el trabajo enajenado-asalariado podría reducirse al mínimo, e incluso, a largo plazo, desaparecer. También se presentan algunos aspectos sobre el decrecimiento económico, según el autor necesario para salvar los recursos naturales del planeta, la biosfera e incluso el género humano, seriamente amenazados por el crecimiento desmesurado actual. Para conseguir este decrecimiento es necesario el trabajo en equipo de ecologistas y marxistas, pero indispensablemente con una apretada colaboración de unos movimientos sociales conscientes.
La apuesta por el decrecimiento. Serge Latouche
El término “decrecimiento” suena a desafío o a provocación, aunque seamos conscientes de que un crecimiento infinito es incompatible con un mundo limitado. El objeto de esta obra es demostrar que, aunque un cambio radical es una necesidad absoluta, optar voluntariamente por una sociedad de decrecimiento es una apuesta que vale la pena intentar para evitar un retroceso brutal y dramático.
Se trata de una propuesta necesaria para reabrir el espacio de la inventiva y de la creatividad del imaginario bloqueado por el totalitarismo economicista, desarrollista y adepto al progreso. Es evidente que dicha propuesta no tiene como objetivo una subversión caricaturesca que consistiría en proclamar el decrecimiento por el decrecimiento. Este propósito sólo sería posible en una “sociedad de decrecimiento”, es decir, en el ámbito de un sistema basado en otra lógica.
Y queda lo más difícil: ¿Cómo se puede construir una sociedad sostenible, también en el Sur? Son necesarias diversas etapas: cambiar valores y conceptos, cambiar de estructuras, relocalizar la economía y la vida, revisar nuestros modos de uso de los productos, responder al desafío específico de los países del Sur. Y finalmente, hay que asegurar la transición de nuestra sociedad de crecimiento a la sociedad de decrecimiento mediante las medidas apropiadas.
El decrecimiento es una apuesta política y estará presente, con seguridad, en los futuros debates electorales.
Objetivo Decrecimiento. Colectivo Revista Silence
Oponiéndose frontalmente a la inercia de la globalización, que acarrea cada vez más paro, más contaminación, un agravamiento del cambio climático y la angustiosa proximidad de una crisis de la energía, Objetivo decrecimiento formula una propuesta radical, utópica tal vez, pero también razonada, un nuevo camino basado en la conciencia de que el planeta es irremediablemente finito.