
En la actual situación, de declive muy acelerado de la biosfera, no basta con idear un modelo óptimo de cultivo, pues cualquiera de las agriculturas posibles, incluso la más adecuada y benéfica, contiene elementos inerradicables de artifialización y regresión de los sistemas biológicos. Debemos, por tanto, considerar el problema de la radical decadencia del mundo natural en su hiper-complejidad, integrando lo agrícola en lo no-agrícola, y reflexionando...